Eran cuatro tipos que estaban jugando dominó en un bar.
Al rato de estar jugando, uno de ellos se levanta para ir al baño.
Aprovechando el descanso, los demás se pusieron a charlar, y uno de ellos dijo:
-¡No es por presumir! Pero a mi hijo le va muy bien en el negocio inmobiliario. Ha ganado tanto dinero que ya hasta le ha regalado una casa a uno de sus amigos …
El siguiente agrega:
– ¡Yo tampoco es por presumir! Pero mi hijo es concesionario de coches de importación,
y gana tanto dinero, que ya hasta le ha regalado un Ferrari a uno de sus amigos …
Y el tercero lo remata con:
-¡Pues mi hijo es corredor de bolsa y como le va tan bien le ha regalado un paquete de acciones de las mejores a un amigo …
En eso llega el que estaba en el baño.
Los tres presuntuosos le preguntan como le va a su hijo, y él les responde:
-¡Pues la verdad, mal! Mi hijo desde pequeño era medio delicado,y ahora de mayor, se ha amariconado completamente. Es un homosexual declarado y trabaja en un salón de belleza del centro de la ciudad. Pero debe ser muy bueno en lo que hace, porque uno de sus novios le ha regalado una casa, otro un Ferrari y otro un paquete de acciones de la mejores …